Cáncer Esofagogástrico
¿Qué es el Cáncer Esofagogástrico?
El cáncer esofagogástrico es el cáncer que afecta al esófago, al estómago o a la unión entre ambos, es decir, la reproducción y crecimiento de células sin control en esta zona del cuerpo.
El esófago une la garganta con el estómago y su función es ayudar a trasladar la comida para su digestión. El estómago, por su parte, tiene una importante función en el cuerpo humano ya que es el principal órgano encargado de la digestión.
Normalmente, tanto el cáncer de estómago como el de esófago aparecen en la mucosa que recubre el interior de ambos órganos o en la zona de unión de los mismos.
Este tipo de cánceres toman como nombre Adenocarcinoma si aparecen en las glándulas mucosas o Carcinoma Epidermoide si aparece en las células que recubren su superficie.
¿Cuáles son los síntomas del cáncer esofagogástrico?
Los síntomas son muy diferentes si se trata de un tipo u otro de cáncer. Si aparece en el estómago puede notarse fatiga, ardor, vómitos o dolor estomacal, además de una pérdida de peso involuntaria. Si es en el esófago, puede provocar dificultades para tragar, pérdida de peso, tos o ardor de estómago.
¿Cómo se diagnostica el cáncer esofagogástrico?
En caso de sospecha de cáncer esofagogástrico, puede prescribirse una endoscopia para examinar el esófago o el estómago. La endoscopia es un tubo unido a una cámara que se introduce por la garganta para buscar lesiones. Si el médico detecta alguna lesión anormal, se extraerá una parte del tejido para poder analizarla mediante biopsia.
¿Cómo se trata el cáncer esofagogástrico?
Los principales tratamientos para el cáncer son la cirugía, la quimioterapia y la radioterapia.
La quimioterapia puede utilizarse antes de la cirugía (quimioterapia neoadyuvante) para reducir el tamaño del tumor o después de la cirugía (adyuvante) para eliminar los vestigios tumorales que puedan quedar tras la intervención.
La radioterapia se utiliza normalmente antes de la cirugía para ayudar a reducir el tamaño del tumor.
En cualquier caso, la cirugía es la técnica de elección para la curación y su uso dependerá del estadio y tamaño del tumor además de las características propias de cada persona.
- En cánceres en los primeros estadios o de tamaño pequeño: podrá utilizarse una cirugía no invasiva, que implica la extracción del tumor y de las células colindantes a través de una endoscopia o de cirugía laparoscópica (Enlace).
- En tumores de mayor tamaño o que se hayan extendido en el esófago o estómago puede requerir la extirpación de parte del órgano afectado. Si es el esófago, hablaríamos de una esofaguectomía. Si es el estómago, una gastrectomía, y si el cáncer ha afectado ambos órganos una esofagogastrectomía. En cualquier de estos casos, puede ser necesario también extraer parte de los ganglios linfáticos más próximos.
En general, es posible realizar la cirugía mediante laparoscopia, una técnica de cirugía poco invasiva que se realiza mediante la creación de dos aperturas en la piel a través de las cuales se realiza la intervención. Este tipo de cirugía implica menos riesgos para el paciente y una más pronta recuperación.
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